IVª MARCHA POR LA RÍA DE SAN MARTÍN

El domingo 28 de junio nos juntamos unas 50 personas para realizar la marcha a pie entre Torrelavega y Suances, recordando los proyectos de instalación de dos centrales térmicas de gas en terrenos de la fábrica de SOLVAY. Uno de los proyectos promovidos por EON-VIESGO de 500 MW de potencia y el otr, de 48 MW, promovido por la propia SOLVAY .

Partimos a las 10,15 minutos del pabellón La Habana Vieja con un intenso sol y realizamos la primera parada junto al río Saja-Besaya, al lado de la fábrica de SNIACE.

Atravesamos el puente de madera que permite cruzar el canal de desagüe por donde las fábricas de SNIACE vierten la mayor parte de sus residuos al río. Tuvimos que cruzarlo rápido pues el intenso olor era insoportable.

Unos metros más adelante nos sorprendió una garza real en medio del río. Es imposible no preguntarse cómo es posible que estas aves puedan sobrevivir en un río tan contaminado como éste.

A la altura del puente de La Barquera, que comunica Barreda con Viveda, tomamos la carretera para dirigirnos a la entrada de la fábrica de SOLVAY. Pasamos junto a la zona, antigua ubicación de Hispavic, donde la empresa proyecta instalar la térmica de gas de 48 MW.

Nos hicimos una foto junta a la entrada de la fábrica para recordar los dos proyectos de centrales térmicas que pretenden levantar dentro de sus instalaciones.

Retomamos la senda junto al río, en el único tramo que pudimos disfrutar de sombra. Desde esta zona no se puede ver, debido a la intensa vegetación, uno de los vertidos más importante de Solvay a la Ría, pues en esta zona ya llega la influencia mareal.

Enseguida llegamos a la fábrica AZSA que, sin embargo, tiene tres vertidos muy visibles a la ría en un tramo de unos 400 metros. Llama la atención tanto el caudal del vertido como su visibilidad.

El color amarillo delata el alto contenido de azufre de unos de los tres vertidos que sin pudor alguno (y sin sanción alguna) se mezcla con el agua de la Ría.

Unos metros más adelante se vuelve a apreciar claramente el tercer vertido de AZSA. Llama la atención la impunidad con que estas empresas vierten sus residuos a la Ría de San Martín sin ningún tipo de tratamiento descontaminador.

El día resultó muy caluroso y quizás motivó que una persona padeciera una lipotimia casi al final del recorrido. Sin duda la falta de ingestión de agua fue determinante para que esa persona sufriera el desmayo. Fue atendida por dos enfermeras que realizaban la marcha.

Queremos resaltar la falta de interés del alcalde de Suances por mostrar el apoyo a esta IVª MARCHA, cuando en las demás ediciones había colaborado con la presencia de protección civil, la cesión del polideportivo y la donación de bebida para finalizar la marcha.

Plataforma contra las Centrales Térmicas.

Descenso del Río Deva

Este domingo 21 de junio 39 personas realizamos el descenso en canoa por el Río Deva. El día estuvo soleado, pero entre el viento fresco y el agua del río el recorrido resultó muy agradable.

Tardamos un buen rato en salir por esperar a un grupo del ayuntamiento de Udías, pero estamos acostumbrados a esta espera después de varios años de actividad. En esta ocasión la furgoneta nos dejó en la carretera y tuvimos que aproximarnos al cauce del río andando.

Como estábamos impacientes, nos echamos al agua para probar y desesperezar un poco los músculos. Patric comenzó a salpicar agua con la pala y se armó un pequeño rifirafe que nos refrescó a todo el personal.

Había mucho agua y estaba más fría que otros años. En esta ocasión nadie se cayó en el primer rápido que se pasó sin problemas, pero sólo era el inicio.

Algunos grupos ya se habían mojado bien, pero llegamos sin percances a la zona de descanso para tomar el bocata y el botellín de agua.

Allí coindicimos con otro grupo que había salido después de nosotros, el de COCEMFE, una asociación de minusválidos de Cantabria, que realizaron la bajada con la ayuda de personas voluntarias.

Enseguida reanudamos la marcha que esta vez sí estuvo accidentada, pero por el grupo de Udías, que llevaban varias personas que no sabían nadar y tuvieron problemas en uno de los vuelcos, pero fueron ayudados por gente de nuestro grupo.

El resto del recorrido sólo tuvo anécdotas pequeñas que se solventaron con chapuzones que no venían mal para reducir el calor del sol.

Se fue alargando mucho el grupo a medida que pasaban los kilómetros y los monitores no tuvieron mucho trabajo.

Ha sido una buena jornada. Buen sabor de boca para el próximo verano. Quizás algunos repitamos dentro de unas semanas, pues ha sabido a poco.